¿Cómo nos conoce Dios?
La Biblia nos enseña que Dios es un ser infinitamente poderoso y omnisciente, lo cual significa que conoce todo, incluso antes de que suceda. Esto incluye el conocimiento íntimo y personal de cada individuo que ha existido, existe o existirá en el mundo. Es sorprendente pensar que Dios nos conoce a cada uno de nosotros de manera individual y única, incluso antes de nacer.
Dios te conocía antes de nacer
El Salmo 139:13-16 nos dice: “Tú creaste mis entrañas; me formaste en el vientre de mi madre. Te alabo porque soy una creación admirable. ¡Tus obras son maravillosas! ¡Lo reconozco muy bien! Mis huesos no te estaban ocultos cuando en lo más recóndito era yo formado, cuando en lo más profundo de la tierra era yo entretejido. Tus ojos vieron mi cuerpo en gestación. Todo esto estaba registrado en tu libro; cada uno de mis días estaba diseñado y se escribieron en tu libro antes de que uno solo de ellos existiera”.
Estas palabras nos revelan el profundo amor y cuidado que Dios tiene por cada uno de nosotros desde el momento de nuestra concepción. Antes de nacer, Dios nos conocía plenamente, incluso cada detalle de nuestro ser físico y nuestro propósito en la vida. Esto es una muestra del conocimiento divino que trasciende cualquier comprensión humana.
Dios y su conocimiento eterno
El conocimiento de Dios va mucho más allá de nuestra existencia terrenal. La Biblia también nos enseña que Dios conoce el principio y el fin de todas las cosas. En Isaías 46:10 dice: “Desde el principio anuncio el fin, desde la antigüedad, lo que aún no ha sucedido; yo digo: Mi propósito permanecerá en pie, y todo lo que me propongo lo cumpliré”.
Esto significa que Dios no solo nos conoce antes de nacer, sino que también conoce nuestro futuro y los eventos que aún no han sucedido. Su conocimiento eterno y completo nos brinda una confianza y seguridad en saber que nuestro destino está en Sus manos, y que Él tiene un plan perfecto para nuestras vidas.
El amor y cuidado de Dios hacia nosotros
El hecho de que Dios nos conozca íntimamente desde antes de nacer también demuestra Su amor y cuidado hacia cada uno de nosotros. No somos meramente seres insignificantes en un universo vasto y desconocido, sino que somos preciosos para Él. En Mateo 10:30, Jesús nos dice: “Incluso los cabellos de su cabeza están todos contados”.
Esta afirmación de Jesús nos muestra cuán detallista y atento es Dios con nosotros. Él está interesado en cada aspecto de nuestras vidas, desde los detalles más pequeños hasta los más grandes. Su conocimiento de nosotros antes de nacer es una manifestación de Su amor incondicional y Su deseo de tener una relación cercana con nosotros.
Aplicando el conocimiento divino en nuestra vida
Saber que Dios nos conoce antes de nacer y que tiene un plan para nuestras vidas es algo poderoso y relevante para nuestra vida diaria. Esto nos brinda una confianza y seguridad en medio de las incertidumbres y desafíos que enfrentamos. Saber que el Creador del universo nos conoce de manera íntima y personal nos da la certeza de que nunca estamos solos y que siempre hay un propósito para nuestra existencia.
En lugar de vivir preocupados por el futuro o buscar nuestro propósito en logros materiales o reconocimiento humano, podemos encontrar paz y satisfacción en la relación con Dios. Podemos confiar en que Él nos guiará y nos dará dirección en cada paso que damos.
¿Dios conoce nuestras decisiones antes de tomarlas?
Sí, Dios conoce nuestras decisiones incluso antes de que las tomemos. Su conocimiento infinito se extiende a cada aspecto de nuestras vidas, incluyendo nuestras decisiones.
¿Puede Dios cambiar el plan que tiene para nuestra vida?
Dios tiene un plan perfecto para nuestras vidas, pero también nos ha dado libre albedrío. Si bien Él puede influir en nuestras decisiones, al final, somos responsables de nuestras acciones y elecciones.
¿Qué sucede si no seguimos el plan de Dios?
Dios respeta nuestra libertad de elección y nos permite tomar nuestro propio camino. Sin embargo, al alejarnos de Su plan, podemos enfrentar dificultades y consecuencias negativas. Aun así, Dios siempre ofrece su amor y gracia para aquellos que se arrepienten y buscan Su dirección.
¿Podemos confiar en el conocimiento divino incluso en momentos de adversidad?
Sí, el conocimiento divino es un fundamento sólido en el que podemos confiar, incluso en medio de la adversidad. Saber que Dios nos conoce y nos guía nos brinda consuelo y esperanza en tiempos difíciles, recordándonos que no estamos solos y que Su plan todavía está en marcha.