La infancia y los sueños de José
La historia de la familia de José en la Biblia es una fascinante narrativa llena de giros y vueltas. Comienza con la infancia de José, quien fue el undécimo hijo de Jacob y el primero con su esposa favorita, Raquel. Desde una edad temprana, José era especial y eso causaba cierta envidia entre sus hermanos.
Un día, José tuvo unos sueños vívidos en los que veía cómo él era elogiado y adorado por todos, incluso por sus propios hermanos y padres. Estos sueños premonitorios anunciaban que José sería un líder poderoso y respetado. Sus hermanos, llenos de celos y enojo, comenzaron a odiar aún más a José por sus sueños grandiosos.
La venta de José como esclavo
La historia da un giro inesperado cuando los hermanos de José deciden deshacerse de él de una vez por todas. En un acto de crueldad, lo vendieron como esclavo a unos mercaderes que pasaban por allí. José fue llevado a Egipto y separado de su familia, enfrentándose a un futuro incierto.
En Egipto, José fue vendido a Potifar, un oficial del faraón. A pesar de su difícil situación, José demostró ser un hombre íntegro y trabajador, ganándose la confianza de sus superiores. Sin embargo, Potifar, en un acto de falsas acusaciones, lo acusó falsamente de intentar seducir a su esposa y José fue encarcelado.
H3: La interpretación de los sueños en prisión
Aunque José estaba atrapado en la cárcel, Dios no lo abandonó. Mientras estaba en prisión, tuvo la oportunidad de interpretar los sueños de dos de sus compañeros de cautiverio, el copero y el panadero del faraón. Sus interpretaciones resultaron ser correctas y, a cambio, el copero prometió recordar a José ante el faraón.
Sin embargo, el copero se olvidó de José durante algún tiempo. Pero, finalmente, el faraón tuvo un sueño que lo desconcertó. Nadie en la corte sabía interpretarlo, excepto el copero, quien recordó a José y le contó al faraón sobre su don para interpretar sueños.