Las cualidades que debe tener un apóstol según la Biblia

Cuando hablamos de apóstoles, la Biblia nos ofrece una guía clara de las cualidades que deben tener aquellos que son llamados a ocupar este importante papel en la expansión del mensaje de Dios. En este artículo, exploraremos las características esenciales que un apóstol debe poseer según la Sagrada Escritura. Desde la humildad y el servicio hasta la capacidad de realizar milagros, analizaremos detalladamente cada una de estas cualidades para comprender mejor el llamado de un apóstol.

Humildad: La base de todo apóstol

La humildad es la primera cualidad que la Biblia nos destaca en un apóstol. En el Evangelio de Mateo, Jesús dice: “Los primeros serán postreros y los postreros, primeros” (Mateo 20:16). Esto significa que un apóstol debe comprender que su papel no es el de ser el líder supremo, sino el de servir a los demás con humildad. Esta humildad se manifiesta en la disposición de poner las necesidades de los demás por encima de las propias y en reconocer que todo don y todo éxito proviene de Dios. Un apóstol humilde no busca la gloria ni la exaltación personal, sino que trabaja en silencio para llevar el amor y la verdad de Dios a los demás.

La autoridad para enseñar y predicar

Uno de los roles principales de un apóstol es enseñar y predicar el mensaje de Cristo con autoridad. En Hechos 1:21-22, encontramos los criterios para escoger a un nuevo apóstol después de la partida de Judas: “Es necesario, pues, que de estos hombres que han estado juntos con nosotros todo el tiempo que el Señor Jesús entraba y salía entre nosotros, comenzando desde el bautismo de Juan hasta el día en que de entre nosotros fue recibido arriba, uno sea hecho testigo con nosotros, de su resurrección”. Un apóstol debe ser testigo ocular de las enseñanzas y la resurrección de Jesús para poder proclamar con autoridad el mensaje del evangelio. Además, debe tener una profunda comprensión de las Escrituras y la habilidad de explicarlas de manera clara y convincente.

La importancia de la oración y la fe

Otra cualidad fundamental de un apóstol es su vida de oración y su fe inquebrantable en Dios. En Hechos 6:4, los apóstoles dicen: “Nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la palabra” Esta declaración muestra que la oración es una parte indispensable de la vida de un apóstol. Las decisiones, los liderazgos y las enseñanzas deben estar enraizadas en una profunda comunión con Dios. Además, la fe en Dios es esencial para un apóstol, ya que su misión puede enfrentar obstáculos y desafíos. La confianza en el poder de Dios y una fe sólida le permitirán perseverar a pesar de las dificultades y cumplir con su llamado de manera efectiva.

Capacidad de realizar milagros

Un aspecto relevante en la vida de un apóstol es la capacidad de realizar milagros. En Hechos 3:6, Pedro realiza un milagro al sanar a un hombre cojo desde nacimiento: “En el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda” Esto muestra que los apóstoles, así como Jesús, tenían el poder sobrenatural de realizar señales y prodigios para confirmar su ministerio y demostrar el poder de Dios. Aunque no todos los apóstoles necesariamente realizaban milagros, esta habilidad estaba presente en muchos de ellos y servía para fortalecer la fe de los creyentes y atraer a aquellos que todavía no habían experimentado el poder de Dios.

Preguntas frecuentes:

1. ¿Cuántos apóstoles existieron según la Biblia?
Según la Biblia, hubo doce apóstoles originales que fueron elegidos por Jesús durante su ministerio terrenal. Sin embargo, después de la partida de Judas Iscariote, se eligió a Matías como su reemplazo, lo que nos lleva a un total de trece apóstoles. También encontramos referencias a otros apóstoles como Pablo y Bernabé en el Nuevo Testamento.

2. ¿Puede haber apóstoles en la actualidad?
Algunas denominaciones cristianas creen que el papel de los apóstoles se limita a los doce originales y a aquellos que fueron testigos oculares de Jesús. Sin embargo, otras creen que los apóstoles todavía existen en la iglesia actual, pero con un enfoque más centrado en el discipulado y la expansión del Reino de Dios. La interpretación varía según las creencias y enseñanzas de cada denominación.